Después de mi entrenamiento, mi amigo me mostró, no pude resistir su gordo trasero. Corrimos a casa, despojándonos de la ropa y me puse a algo de acción a pelo. Sus gemidos y adoración de culo lo hicieron inolvidable.
Soy un exhibicionista total, y me encanta mostrar mi culo a mis amigos del gimnasio.Un día, después de un entrenamiento agotador, mi lindo amigo latino no pudo resistirse.Estaba hipnotizado por mi gran y redondo trasero, y me suplicó que lo dejara adorar.¿Cómo podría decir que no?Nos dirigimos a mi lugar, y antes de que lo supiera, él me lamía y besaba el culo, tal y como yo quería.Pero luego, lo llevó un paso más y me fue a pelo.Me sorprendió al principio, pero la sensación fue demasiado buena para resistirse.Su gran polla me cabía perfectamente, y lo fuimos durante horas.La vista de su enorme polla follándome por detrás fue suficiente para hacer que alguien se corriera.Y cuando finalmente lo hicimos, fue un espectáculo para contemplar.El entrenamiento gay perfecto terminó con nosotros cubierto de sudor y semen en mi cama.
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